Dos Bocas fue una mentira todo el tiempo durante todo el sexenio. No operará en 2024, y puede que en 2025 se tarde mucho más. Reuters, la a...
Dos Bocas fue una mentira todo el tiempo durante todo el sexenio.
No operará en 2024, y puede que en 2025 se tarde mucho más.
Reuters, la agencia indiscutible en materia de periodismo financiero, publicó una nota de Adriana Barrera y Estefanía Eschenbacher en la que citan fuentes dentro de la propia refinería y Pemex, en donde dan detalles demoledores de este asunto.
Los ingenieros todavía están trabajando en partes individuales de la refinería y luego enfrentarán el desafío aún mayor de conectarlas. Una de las fuentes describe este último paso como un proceso enormemente complejo y agonizante de prueba y error que lleva meses. En ese escenario, la primera de las dos líneas de producción de la refinería estaría lista entre octubre y noviembre de este año, no en julio como dijo el presidente López Obrador.
Además de ese proceso, las partes que aún necesitan trabajo incluyen la planta de craqueo catalítico fluido, donde las fracciones pesadas de petróleo se convierten en productos más ligeros, y la planta donde se elimina el azufre a alta presión y alta temperatura, que apenas son el paso número uno. Otro desafío va a ser la planta de coquización que convierte y procesa el combustible residual.
Reuters, antes de publicar este reportaje, consultó a Pemex y a la oficina del Presidente de la República para que dieran su versión sobre este tema. Ninguna de las dos quiso responder.
Y es que no hay nada que decir al respecto: Dos Bocas no va a estar operando ni siquiera en 2025
Hagamos un ejercicio de memoria de las mentiras de López Obrador sobre este tema, quien en mayo de 2019 juró que la refinería debería lista en menos de tres años y a un costo de 8 mil millones de dólares. Cuando las empresas que participaron en la licitación informaron que se necesitaban 12 mil millones de dólares y poco más de tres años para edificarla el tirano declaró desierta la la licitación y le encargó directamente a la Secretaría de Energía la construcción de esta refinería.
A seis años de distancia Dos Bocas no sólo no refina ni una gota de gasolina, sio que ya costó más de 16 mil millones de dólares. Y el costo sigue creciendo.
Pero ya sabíamos todos que López Obrador mintió todo el tiempo sobre esto. ¿Qué objeto tiene este comentario?
A estas alturas, reprocharle a AMLO sus mentiras sale sobrando.
De hecho, quizá sea más objetivo reconocer su enorme capacidad de explotar y beneficiarse de la necesidad propia del mexicano de ser engañado una y otra vez.
Supo usar nuestra urgencia por ser utilizados. Se aprovechó de nuestra carencia de capacidad de análisis. Nuestra escasez de criterio. Nuestra indigencia mental. Nuestra miseria como electores. Nuestra pobreza como ciudadanos.
Amamos que nos mientan. Adoramos al bocón que insulta a otros bocones. Le entregamos todo al inepto que vilipendia. Adoramos a los Chabelos de la política. A los Cepillines que dicen tonterías en la tele o en las redes sociales. Somos focas que aplauden la destrucción.
Y lo logramos. Hemos institucionalizado la destrucción de México.
Felicidades.
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