Boris Johnson hablando en la Cámara de los Comunes, el pasado 3 de septiembre (©UK Parliament/Roger Harris/Handout via REUTERS) El primer mi...
Boris Johnson hablando en la Cámara de los Comunes, el pasado 3 de septiembre (©UK Parliament/Roger Harris/Handout via REUTERS)
El primer ministro británico, Boris Johnson, suspenderá el Parlamento el próximo martes para reabrirlo el 14 de octubre, cuando Isabel II pronunciará el llamado Discurso de la Reina, que inaugurará el nuevo curso parlamentario, confirmó este miércoles el Gobierno.
Esta suspensión desde la noche del martes dará tiempo al Ejecutivo a preparar su agenda legislativa, que será leída por la monarca en la Cámara de los Comunes en una tradicional ceremonia a la que la soberana acude en carruaje desde el palacio de Buckingham.
En un comunicado, Johnson ha adelantado que el 14 de octubre presentará sus planes para mejorar los servicios públicos y las infraestructuras, y mantuvo que el “brexit” -la salida del Reino Unido de la Unión Europea- “se hará” en la fecha prevista del 31 de octubre.
Si, como es su intención, logra un acuerdo de retirada con los Veintisiete para el Consejo Europeo del 17 y el 18 de octubre, su programa legislativo incorporaría un proyecto de ley relativo a ese tratado, que podría ser aprobado por el Parlamento antes de finales de mes.
Boris Johnson
Normalmente, hay un Discurso de la Reina cada año, pero actualmente no se produce ninguno desde el 21 de junio de 2017, porque la anterior primera ministra, Theresa May, quiso un curso parlamentario más largo a fin de negociar la salida del país de la UE.
El pasado agosto, Boris Johnson decretó una suspensión del Parlamento entre el 10 de septiembre y el 14 de octubre, pero, tras recibir varias demandas, el Tribunal Supremo la declaró ilegal, al considerar que era excesivamente larga y perseguía obtener una ventaja política.
La suspensión provisional decretada ahora, que tiene una duración más habitual, significa que el próximo miércoles no habrá la sesión semanal de preguntas al primer ministro, con la que los diputados controlan la actividad del Gobierno.
Tampoco dará tiempo a que la oposición realice a corto plazo más maniobras legislativas a fin de impedir una salida de la UE sin acuerdo el 31 de octubre.
El Ejecutivo de Johnson difundió el miércoles su propuesta para conseguir un pacto de “brexit” con Bruselas antes de esa fecha, que pasa por sustituir la polémica salvaguarda para evitar una frontera física entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
El líder conservador propone mantener una área regulatoria común para bienes en toda la isla, pero también plantea realizar controles aduaneros no en la frontera pero sí en dependencias cercanas, lo que en principio no era deseable ni para Dublín ni para Bruselas.
Johnson ha señalado que, si no consigue llegar a un acuerdo con la UE, está dispuesto a dejar el bloque sin tratado bilateral, a pesar de que se lo impide una ley aprobada por el Parlamento antes de su primera suspensión el 10 de septiembre.
Por su parte, el referente de la Eurocámara para el Brexit, el eurodiputado liberal Guy Verhofstadt, aseguró este miércoles que no les acababa de convencer la propuesta del primer ministro británico para desbloquear el acuerdo de divorcio con Reino Unido.
“La primera evaluación de casi todos los miembros (...) no fue en absoluto positiva”, aseguró Verhofstadt, después de una reunión del grupo de eurodiputados sobre el Brexit con el negociador europeo, el francés Michel Barnier.
Activista anti Brexit (Photo by Paul ELLIS / AFP)
El ex primer ministro belga dio a entender que la propuesta británica no es un intento serio de llegar a un acuerdo, sino un esfuerzo para echar la culpa a Bruselas de un eventual fracaso, a semanas del Brexit previsto el 31 de octubre.
Johnson había pedido a Bruselas “alguna concesión” para alcanzar un acuerdo, porque de lo contrario su país, prometió, abandonará el bloque brutalmente a final de mes. “El Reino Unido está haciendo concesiones y realmente espero que nuestros amigos europeos lo entiendan y hagan alguna concesión a su vez”, dijo el primer ministro ante los miembros de su Partido Conservador al clausurar su congreso anual en Mánchester.
Y, aferrado a su promesa de no pedir más aplazamientos, aseguró que el país “abandonará la UE el 31 de octubre, pase lo que pase”, dejando claro que la alternativa a su plan es una brutal salida del bloque sin acuerdo.
El primer ministro británico, Boris Johnson, suspenderá el Parlamento el próximo martes para reabrirlo el 14 de octubre, cuando Isabel II pronunciará el llamado Discurso de la Reina, que inaugurará el nuevo curso parlamentario, confirmó este miércoles el Gobierno.
Esta suspensión desde la noche del martes dará tiempo al Ejecutivo a preparar su agenda legislativa, que será leída por la monarca en la Cámara de los Comunes en una tradicional ceremonia a la que la soberana acude en carruaje desde el palacio de Buckingham.
En un comunicado, Johnson ha adelantado que el 14 de octubre presentará sus planes para mejorar los servicios públicos y las infraestructuras, y mantuvo que el “brexit” -la salida del Reino Unido de la Unión Europea- “se hará” en la fecha prevista del 31 de octubre.
Si, como es su intención, logra un acuerdo de retirada con los Veintisiete para el Consejo Europeo del 17 y el 18 de octubre, su programa legislativo incorporaría un proyecto de ley relativo a ese tratado, que podría ser aprobado por el Parlamento antes de finales de mes.
Boris Johnson
Normalmente, hay un Discurso de la Reina cada año, pero actualmente no se produce ninguno desde el 21 de junio de 2017, porque la anterior primera ministra, Theresa May, quiso un curso parlamentario más largo a fin de negociar la salida del país de la UE.
El pasado agosto, Boris Johnson decretó una suspensión del Parlamento entre el 10 de septiembre y el 14 de octubre, pero, tras recibir varias demandas, el Tribunal Supremo la declaró ilegal, al considerar que era excesivamente larga y perseguía obtener una ventaja política.
La suspensión provisional decretada ahora, que tiene una duración más habitual, significa que el próximo miércoles no habrá la sesión semanal de preguntas al primer ministro, con la que los diputados controlan la actividad del Gobierno.
Tampoco dará tiempo a que la oposición realice a corto plazo más maniobras legislativas a fin de impedir una salida de la UE sin acuerdo el 31 de octubre.
El Ejecutivo de Johnson difundió el miércoles su propuesta para conseguir un pacto de “brexit” con Bruselas antes de esa fecha, que pasa por sustituir la polémica salvaguarda para evitar una frontera física entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
El líder conservador propone mantener una área regulatoria común para bienes en toda la isla, pero también plantea realizar controles aduaneros no en la frontera pero sí en dependencias cercanas, lo que en principio no era deseable ni para Dublín ni para Bruselas.
Johnson ha señalado que, si no consigue llegar a un acuerdo con la UE, está dispuesto a dejar el bloque sin tratado bilateral, a pesar de que se lo impide una ley aprobada por el Parlamento antes de su primera suspensión el 10 de septiembre.
Por su parte, el referente de la Eurocámara para el Brexit, el eurodiputado liberal Guy Verhofstadt, aseguró este miércoles que no les acababa de convencer la propuesta del primer ministro británico para desbloquear el acuerdo de divorcio con Reino Unido.
“La primera evaluación de casi todos los miembros (...) no fue en absoluto positiva”, aseguró Verhofstadt, después de una reunión del grupo de eurodiputados sobre el Brexit con el negociador europeo, el francés Michel Barnier.
Activista anti Brexit (Photo by Paul ELLIS / AFP)
El ex primer ministro belga dio a entender que la propuesta británica no es un intento serio de llegar a un acuerdo, sino un esfuerzo para echar la culpa a Bruselas de un eventual fracaso, a semanas del Brexit previsto el 31 de octubre.
Johnson había pedido a Bruselas “alguna concesión” para alcanzar un acuerdo, porque de lo contrario su país, prometió, abandonará el bloque brutalmente a final de mes. “El Reino Unido está haciendo concesiones y realmente espero que nuestros amigos europeos lo entiendan y hagan alguna concesión a su vez”, dijo el primer ministro ante los miembros de su Partido Conservador al clausurar su congreso anual en Mánchester.
Y, aferrado a su promesa de no pedir más aplazamientos, aseguró que el país “abandonará la UE el 31 de octubre, pase lo que pase”, dejando claro que la alternativa a su plan es una brutal salida del bloque sin acuerdo.