El director general de Gallbo, Manuel Gallardo, aseguró que son muchos los mexicanos que abandonan una reclamación de seguro, debido a qu...
El director general de Gallbo, Manuel Gallardo, aseguró que son muchos los mexicanos que abandonan una reclamación de seguro, debido a que el procedimiento es laborioso y no tienen el acompañamiento correcto de un agente para realizar el proceso.
“Muchos de los que reciben una declinación o rechazo ya no continúan con el proceso ante Condusef (Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros) ante tribunales porque no tienen los conductos para llegar a un experto que le guíe en los siguientes pasos”, dijo durante la presentación de los 12 talleres con causa que ofrecerán a agentes de seguros del país.
Agregó que estos talleres, de los cuales se obtendrán recursos para donarlos al Fondo para la Paz y a la Fundación Markoptic, son necesarios porque cuando ocurre un siniestro, el asegurado tiene muchas dudas, y al primero que pregunta es a su agente de seguro y si él no tienen el conocimiento, genera incertidumbre en el cliente.
“Cuando tienes un cliente que no está seguro con el acompañamiento que le haces, empieza a buscar opiniones y a cometer acciones que no le van a beneficiar en su reclamación. Por desconocimiento o falta de experiencia empieza a incurrir en errores porque no tuvo una guía acertada desde el inicio de su siniestro y eso es lo que queremos evitar”, señaló.
El directivo de la firma especializada en asesoría en reclamaciones de seguros, explicó que hay muchos siniestros que dejan de indemnizarse o que se indemnizan en menor cuantía por los errores que el propio asegurado comete, cosas que eran previsibles a través del acompañamiento de un agente de seguros capacitado.
No obstante, agregó, no tuvieron acceso a ellos y el asegurado termina teniendo una mala experiencia y eso no ayuda al sector; lo que queremos es que el sector se fortalezca, ya que si después de siniestro recibe una indemnización, es alguien que se queda leal al sector asegurador y siguen consumiendo más seguros.
“Es muy desafortunado que tú como asegurado tengas una mala experiencia y termines diciendo ‘ya no voy a contratar otro seguro’, eso ocurre con mucha frecuencia. Si fortalecemos y cuidamos al que ya confío en el sector y que adquiere pólizas, permite que haya más difusión y hace que la gente confíe en el sector”, destacó.
Gallardo señaló que cuando un usuario tiene mala experiencia con su aseguradora, cambia de agente porque sintió que no tenía la capacidad y la experiencia para llevarlo por buen camino.
O bien, cambia de agente y de aseguradora, y en el peor de los casos ya no quieren contratar seguros y mejor dice ahorrar, una situación que no ocurre, agregó.
“Esa persona que venía adquiriendo seguros, que podía ser un recomendador positivo se convierte en un recomendador negativo porque en cada oportunidad va a decir que las aseguradoras no pagan y ya no contrata seguros, y eso inhibe a sus amigos, compañeros a que crean en el sector”, advirtió.
También dijo que el seguro de daños es el más complejo de todos y es donde las cuantías de pérdidas son muy superiores, y que son cantidades de dinero que hacen la diferencia entre que una empresa continúe con su operación y genere empleos y productividad o se quede sin continuar ese proceso.
“Queremos que la cultura de seguro crezca y tengamos la oportunidad de cuando ocurran catástrofes, el asegurado, la familia o el empresario tengan una segunda oportunidad de continuar con sus actividades, de recuperar su patrimonio”, sostuvo el director de Gallbo.
Por su parte, Gustavo Maldonado, director general de Fondo para la Paz, destacó que la alianza con Gallbo beneficiará a las familias indígenas de escasos recursos del país que ellos apoyan.
“Gallbo imparte los talleres y la utilidad que se genere en esos talleres se va a dividir en la fundación Markoptic y Fondo para la Paz; nosotros invertiremos esos recursos en el desarrollo sostenible de las comunidades indígenas que son 110 localidades en todo el país”, apuntó.
Detalló que son comunidades indígenas que viven en situación de pobreza con las que trabajan para fortalecer sus capacidades y para que ellos con su propio esfuerzo puedan sacar adelante a su comunidad, por ejemplo, en temas de acceso al agua, saneamiento, infraestructura escolar, protección del medio ambiente, recuperación de suelos, entre otros.
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